miércoles, 10 de junio de 2009

Me lo aviento improvisado

Este me lo aviento improvisado y sin ver, me lo aviento con las luces apagadas y escuchando unas guitarras.

Me lo aviento después… soñando la lluvia.

Y escuchó a Janis y sus gritos. A la pestaña de la casa no la entiendo. Prefiero no distraerme entre palomas y malos talentos, mejor sueño con la lluvia y los buenos viajes, y con la seca de mi boca que reclama tragos del pianito de la chola socialista. Dándome la buena vibra del calor amarillo.

Entre el abandono y el babylon todo suena peor pero es más rico. No espero darles huevos de nada, no quiero engañarlos, no espero vender consonantes, ni ruidos bonitos, solo grasnidos del granizo de afuera.

Y no apetezco del te quiero sino del amoraré soñando tu cintura, amortajado de pulmones y cordura. Prefiero la amorirán mis manos ciegas.

Te lo mereces en todas tus vidas, moraleja del cuento que toca en tu pecho. Ya las guitarras suenan de nuevo en las cucarachas. Quién me entenderá si no los teclados de este sueño.

No amordaces mi boca a tus silencios, ni los muerdas des deño de otro cielo. Muestreo y pestañeo se canden, tocando la puerta en mi ferro, y el bosanova se asoma como desde una luna en Brasil, y no sé donde pararé saxo.

Voz de vivir toda una vida, apareces como la nostalgia de la gris. Cada noche se te quita lo tímido con acento negro. Quizá hoy unas gotas te vencieron. Los espacios de nada gris no tuvieron nada que ver en mis canales, mil canales, caneloides, binoides canabinoides. Nada, dentro de nada. Dentro de mucho para siempre. Te quiero noche, y todo el que lea sin tiempo. Nunca la lluvia me llamó tanto.

2 comentarios:

  1. Mis viajes no salen tan bien como los tuyos...

    Clan de pachecos, ya no está ganando la cabeza.


    Te quiero mucho y la lluvia tmabién.

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  2. viajar en espiral he
    improvisar
    solo la lluvia te acompañara

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